Tres estudios realizados con la sonda Messenger que llegó a este planeta el año pasado , revelan que en el polo norte de Mercurio, existe una gran cantidad de hielo de agua en abundancia y una misteriosa capa oscura compuesta de orgánicos. Este hallazgo ha sido publicado por primera vez en Science.
Esto, ha resultado ser sorprendente debido a que este podía haber sido el lugar más improbable para este hallazgo dada su proximidad al Sol y las temperaturas infernales que hay hasta los 450 grados en su ecuador. Aunque debido a la inclinación de su eje de rotación, que es menos de 1grado, existen zonas polares que no reciben nunca la luz del Sol, hasta los 185 grados bajo cero. También, en estos depósitos materiales hay un extraño material oscuro posiblemente procedente de la cantidad de radiación del Sol, que permite que el hielo se mantenga estable.
Sin embargo, Sean Solomon investigador principal de la misión, durante más de 20 años ha estado deliberando sobre si un planeta tan cercano al Sol podía tener hielo en abundancia en las zonas de sombra permanentes en sus polos y ahora, la Messenger a transmitido un veredicto afirmativo. Sigue habiendo preguntas sobre este tema ya que no se sabe si los compuestos orgánicos han experimentado reacciones químicas o si en Mercurio existe alguna zona aislada para que estos compuestos se mezclen con agua en estado líquido. Con el tiempo se responderán a estas preguntas si continuamos con la exploración.
Este descubrimiento supone el planteamiento de que Mercurio pueda reunir las condiciones adecuadas para plantearse habitar allí en un futuro.